Intentas cuidarte y superar pequeños baches anímicos que se van presentando en estos días. Es normal que el estado de ánimo no sea precisamente el mejor, pero a veces tú misma propicias altibajos de humor con una actitud que no te beneficia en nada.
¡Venga! ¡Arriba! No te castigues más pensando que las cosas no tienen arreglo y que tú has de asumir las consecuencias.
¡No! En primer lugar piensa que tus problemillas personales tienen solución, basta con que dejes de verte con ojos culpables.
Y si te preocupas también por cosas de los demás, por egoísta que parezca, practica aquello que dice “que cada palo aguante su vela”, porque en tu caso no es egoísmo, es puro instinto de supervivencia. ¡Quiérete un poquitín más! Cuando todo vuelva a la normalidad tienes que mantenerte en plena forma.
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