El Leo le teme a la mediocridad en todas sus formas. Tienes miedo de decaer, de ridiculizarte, de perder el afecto o la estima.
Sobre todo, tienes miedo de reconocer que tienes miedo: ¡antes morir! El Leo, intrépido, tiene miedo de su sombra si esta sombra daña su aura. Puedes soportar todo mientras conserves la dignidad.
Marca a los espíritus manteniéndote como el rey de la jungla, disfrázate de León! Cierto, habrá que alquilar un disfraz pero después de todo, la gloria lo amerita.
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