Las personas con Luna en Virgo se volverán perfeccionistas pues necesitarán que todo esté en orden y bajo control para poder sentirse bien y relajados.
El 23 de enero entrará la Luna en Virgo esto traerá que los signos sean más inteligentes y les presten mucha atención a los detalles. Disfrutan aprendiendo ya que siempre hay cosas nuevas por conocer y temas en los que profundizar.
Es esta pasión por el intelecto y la intención de que el saber sea inagotable les hacer intentar llegar a altos estándares de maestría con la Luna en Virgo. También pueden ser un poco tímidos e inseguros debido a esa conciencia que tienen de sus fallos.
Pese a que pudieran juzgar duramente a los otros durante la fecha han de aprender a relajarse y entender que nadie es perfecto en esta vida. Se sentirán útiles y ayudar a los demás en todo lo que pueden. Querrán ver que la casa esté limpia y que no haya nada desordenado, pudiendo caer en lo maniático.
Durante ese tiempo hay que ofrecer la misma confianza que depositen en ti, agradecer cada favor que te hagan de corazón y no desafiar el equilibrio con dosis de caos.
Con la Luna en Virgo toca ponerse manos a la obra y avanzar con tareas aplazadas, hacer orden, limpiar la casa, sacar trabajo adelante. Todo lo que tenga que ver con la organización está favorecido. La atención por el detalle estará exaltada y serán mucho más perfeccionistas en cualquier tarea que emprendan. Momento ideal también para empezar una dieta, desintoxicar el cuerpo o proponerse hábitos de vida más saludables que incluyen el abandonar vicios y ponerse con rutinas de ejercicio. El yoga o el pilates son fenomenales con la Luna en Virgo. Ayudar a los demás generará grandes satisfacciones.
