¡Tiempo de rituales!: Comienza desde cero el 2019

Se acerca el cierre del año y, pese a que se trata de un período agotador, se transforma en una excelente instancia para proponernos los objetivos que queremos alcanzar en el siguiente ciclo del calendario.


A lo largo de la historia, y en las diferentes culturas, las personas han desarrollado un apego por los rituales. Sobre todo en ocasiones en que se requiere marcar un cambio, una nueva etapa que comienza o ciclo que se cierra. Llama a la prosperidad y la buena suerte.

Decreta
Los rituales deben incluir la intención de querer lograr ciertas metas u objetivos a futuro, pero debe ser un trabajo constante. “En un ritual se trabajan energías en pro de alcanzar un anhelo deseado y, en la medida en que estemos frente a ideales positivos, se sugiere practicarlos para no perder la ilusión de que los alcanzaremos”.

Los rituales suelen estar asociados a ciertas fechas, o pautas de tiempos, por lo mismo, aconseja “practicarlos en determinados momentos del día o a una hora puntual.

A modo de prepararnos para el próximo año, renovar energías y dejar atrás lo vivido en el año viejo, lo principal es tomar conciencia de que somos capaces de atraer todo lo positivo a nuestras vidas. “A través de los rituales podemos alejarnos de lo negativo y entrar en caminos de luz”.

No sólo se trata de fijarse metas, ya que, sin duda, organizar nuestras prioridades puede ser positivo, pero debemos evitar que se transformen en frustraciones y “lo mejor es vivir el día a día, tratar de ser feliz y proyectar en calma, dando cada paso a la vez. Así todo fluye mejor”.

Rituales fáciles de ejecutar y que deberían ensayarse diariamente.

Trabajo
Durante la noche de Año Nuevo, y si quieres todo el año, dejar vasijas con almendras, nueces, avellanas, ya que generan estabilidad, trabajo y buenas oportunidades. En otro pocillo meter menta, albahaca, canela y sal gruesa.

Amor
Para el amor, junten tres rosas: una blanca, roja y amarilla, y amárrarlas con tres cintas del mismo color con tres nudos. Luego se cuelgan boca abajo en algún lugar. El blanco es para que el amor se estabilice, el rojo para mantener enamoramiento y el amarillo para que abunde la seguridad. Se deja colgada como amuleto detrás de la puerta, la idea es que se seque; o también se pueden bañar con los pétalos.

Salud
Dentro de una tela verde, se pone jengibre, albahaca, melisa, pasiflora y cedrón. Mejor coserlo un jueves, porque es el día de Júpiter y Arcángel San Rafael, el de la salud y lealtad. Luego se ora el Salmo 31. Esto se puede poner en los cajones de la ropa, debajo de las almohadas o en la cartera.

Llama todo lo bueno a tu vida.
En caso de que estés buscando alejar las vibras negativas, una buena opción es establecer decretos positivos en voz alta, así cuando se enfrentan situaciones desagradables o pensamientos que auto sabotean nuestros objetivos, no se apliquen. De este modo, los decretos ayudan a alejar la energía oscura y atraer lo positivo, que sí o sí se va a cumplir. Sugerencia de decreto: “Decreto que estoy protegido, en calma, equilibrio y armonía. La luz guía mis pasos hacia senderos positivos y la abundancia, que en todo sentido está conmigo y con quienes amo. Así será, así será, así será”.

Límpiate de la carga diaria.
Si queremos desechar lo que nos parece que ha sido una mochila para la espalda,  recomiendo tomar un baño antes de acostarse, idealmente acompañado de jabón de ruda y, además, sumar la intención de “limpiarnos”. Esto liberará el aura de las energías negativas que se han capturado en el transcurso del día. Durante el baño, es recomendable decir en voz alta un decreto positivo con el objetivo de desprogramar lo que nos perjudica y, a su vez, programar lo que queremos atraer a nuestras vidas, así tendremos un mejor sueño y nos prepararemos para el día siguiente.

Propóntelo y obténlo.  
Cuando nos enfrentamos a una fecha especial, un cumpleaños o el inicio de un año, es una buena idea que, durante el día anterior, el mismo día o el siguiente, realicemos todo aquello que quisiéramos que suceda en abundancia durante la etapa que estamos por comenzar. Esta situación permite que energéticamente se concrete lo que queremos para nosotros. Prueba comiendo algo que te guste mucho, trabajando en algo que amas, o bien, compartiendo tiempo con tus seres queridos. Evita las emociones negativas, como las discusiones o peleas, pues también se pueden replicar en el ciclo que comienza.

Reflexiona acerca de lo aprendido.
En ocasiones especiales es importante darse el tiempo de hacer un ritual simbólico. Aprovechar la energía que existe en torno a una fecha, ya que durante estas fechas se caracterizan por una mayor apertura energética en el universo. “Es bueno aprovechar esos días, porque hay mucha gente en la misma sintonía”, explica. Estos son sus dos rituales.

Enterrar el pasado
Hacer una lista de lo que no te gustó vivir durante el 2018 y luego otra lista de las mismas cosas, pero en positivo, sumando. Luego esa lista debe quemarse en una vasija para conservar las cenizas, pues éstas se deberán enterrar en el patio, o bien, en un macetero. Se debe escribir el nombre, dirección y fecha para entregárselo a la tierra como ofrenda, a modo de obsequio.

Sembrar intenciones
A modo de recepción del año, hacer una lista en una hoja con lo que se quiere conseguir, pero ojo, es necesario ser específicos y escribir en una frase lo que se aspira que suceda durante el próximo año. Por ejemplo, “encontrar una relación de pareja basada en el amor y el respeto”. Después, envolver la hoja en papel de regalo, agregar brillos, o pétalos de colores, tales como dorado (valor propio), rojo (amor) o azul (protección) y enterrar en la tierra. De esta manera, se tendrá una semilla de intenciones para el Año Nuevo.