¡Imposible elegir uno solo!
Aries:
El gato de angora. Es inteligente, de carácter dominante y activo. No soporta que lo encierren en un pequeño habitáculo. Prefiere correr y escalar por ahí hasta llegar a lo más alto.
Tauro:
El ragdoll. Un gato bellísimo (de impresionantes ojos), grande y fuerte. Es cariñoso y tierno como un peluche. Y, algo también destacable: muy, muy tranquilo.
Géminis:
El sokoke. El gato que necesita estar en actividad permanente. Corre y juega como si no hubiera mañana. Se caracteriza por su hiperactividad y su buen carácter.
Cáncer:
El burmilla. Es un gato afectuoso y muy sociable. Ideal para el hogar, porque es capaz de convivir y repartir amor para toda la familia: niños, ancianos, primos petardo y seres vivos no humanos incluso.
Leo:
El gato persa. Es el más presumido de su especie. Le encanta que le digan lo guapo que es y que le hagan mimos. Además, es el rey (del sofá). No se molesta en ir de caza, porque conservarse así de sexy y fabuloso es agotador.
Virgo:
El bosque de Noruega. Un gato muy limpio, observador y amante del ejercicio. Le encanta subirse a puntos altos para tenerlo todo controlado.
Libra:
El gato bengalí. Fino, elegante y exclusivo. Muy curioso y pacífico, a pesar de ese aspecto tan salvaje.
Escorpio:
El gato esfinge. Un gato de mirada penetrante y apariencia extraña; de gran agilidad e inteligencia aguda. Fiel, muy fiel a su amo, de quien también demanda una gran atención.
Sagitario:
El seychellois. Un gato curioso, extremadamente juguetón y travieso. Muy divertido y sociable.
Capricornio:
El azul ruso. Este gato tiene una enorme capacidad de aprendizaje. Es fuerte, limpio, tranquilo y muy afectuoso con las personas que aprecia.ç
Acuario:
El occicat. Es un gato de carácter fuerte y difícil de domesticar, como el mismo acuario. No obstante, se convive muy bien con él y el gatito no duda en demostrar su afecto. Eso sí, él decide cómo, cuándo y a quién demostrárselo.
Piscis:
El pixie-bob. Un gato tierno, muy manso y fiel, que convive bien con toda la familia. Destaca su capacidad de dar cariño.
