Aquí vengo con la fé de un alma cristiana
a buscar la misericordia en situación tan angustiosa
para mi en especial
(pedir aquí lo que queremos resolver).
¡Dios Todo Poderoso! No me desampares,
y la puerta que quiera abrirse en mi camino
sea tu mano poderosa la que me la cierre
para no entrar en ella si no me conviene,
o me la dejes abierta si ha de volver mi tranquilidad
tanto tiempo deseada.
A tus pies dejo esta súplica,
que te hace un alma obligada
por el destino a grandes sufrimientos,
que ya no puede combatir
si tu mano poderosa
no detiene la ley de la razón.
Dios mío, perdona los desaciertos
que he cometido yo durante esta existencia
la cual llevo de frente.
Dame fuerzas para soportar
las amarguras de esta vida.
Por las Cinco Divinas Personas:
San Joaquín, Santa Ana, San José,
La virgen María y el Niño Dios que así sea Amén.
Se reza un padre nuestro y Un Gloria.
(Esta oración se reza quince dias. A los ocho días después de hecha esta oración se alcanza lo que se pide por difícil que sea.)