Procedimiento:
Ponemos en el fondo de un recipiente, la fotografía del animal que queremos proteger. El recipiente deberá ser de cristal y redondo.
Colocaremos en el centro del recipiente una vela blanca que procuraremos mantener derecha.
Encenderemos la vela y dejaremos caer la cera sobre la vela. Estando la vela encendida, echaremos alrededor siete cucharadas de azúcar, un chorro de miel y los pétalos de siete claveles blancos si el animal es macho.
Si fuera hembra echaríamos claveles rosas.
Rezaremos una oración a San Antón.
Cortaremos una estampa de este santo en pequeños trozos y los colocaremos alrededor de la vela.
A medida que la vela se vaya consumiendo y esté más baja que el borde del recipiente de cristal, lo cubriremos con un trapo blanco para guardarlo en un lugar alto y oscuro de la casa.