El dinero se ha convertido en el eje central de nuestra vida actual, esto tiene el sentido de dar continuidad y solidez al sistema capitalista, ya que hemos basado nuestra economía en un sistema monetario en vez de basarla en los maravillosos recursos naturales de los que disponemos.
Lo cierto, es que aunque no nos sintamos apegados al dinero, éste es el principal medio para conseguir numerosos bienes y servicios, como por ejemplo parte de nuestra alimentación, el transporte, la electricidad, el gas… etc.
Esta importancia del dinero como herramienta para la consecución de determinados bienes se ha acentuado en la actualidad, debido a la situación de dificultad económica que se vive en numerosos países.
En estas circunstancias tan difíciles ¿Cómo atraer más abundancia y prosperidad a nuestras vidas? Lo cierto es que no nos debemos desesperar pues disponemos de múltiples opciones, en este artículo te hablamos acerca de las plantas para atraer el dinero.
¿Cómo pueden las plantas atraer el dinero?
Cuando hablamos de plantas para atraer el dinero o plantas para atraer el amor, son muchas las personas que se preguntan cómo una simple planta puede llevar a cabo una acción tan compleja, pero lo cierto, es que las plantas poseen su propia energía y ésta influye en nuestro entorno y en nosotros, de este modo, tal y como nos encontremos nosotros, eso atraeremos a nuestras vidas.
La energía de las plantas es un hecho defendido por numerosas corrientes y tradiciones desde tiempos remotos, de hecho, Paracelso (médico, astrólogo y alquimista), consideraba que las propiedades medicinales de estas plantas se originaban en el espíritu de las mismas, que se formaba a través de los impulsos cósmicos recibidos por las constelaciones y planetas.
Otra milenaria tradición nos habla acerca de los efectos energéticos de las plantas, hablamos del Feng-Shui, una corriente oriental que considera a las plantas como verdaderos reservorios de energía capaces de equilibrar el Chi de nuestro hogar, o lo que es lo mismo, la energía vital que impulsa nuestra casa y condiciona nuestro entorno.
A través de la clorofila las plantas atrapan los rayos del sol (energía Yang) y son capaces de irradiar esta misma energía en nuestro entorno, además, estas plantas son capaces de activar energías específicas (según cada especie en concreto) que se vinculan con avances físicos, espirituales, intelectuales e incluso económicos.
Por si fuera poco, las plantas nos ayudan a filtrar la energía negativa muchas veces asociada a la frustración que puede derivarse de los problemas económicos.
Obviamente, para que estas plantas realicen el efecto de atraer la abundancia, es importante que estén sanas y bien cuidadas.
Planta del dinero
Como su nombre indica, es una de las plantas más populares para atraer la prosperidad y la abundancia a nuestras vidas. Botánicamente se conoce con el nombre de Plectranthus Verticillatus y es originaria del sudeste de África.
Algunas fuentes indican que puede utilizarse como amuleto llevándola encima al ir a comprar un boleto de lotería o participando en algún juego de azar.
Otro aspecto importante que cabe destacar es que la planta del dinero debe haber sido regalada por una tercera persona para que mejore la economía de nuestro hogar.
Albahaca
La albahaca es una planta muy común y utilizada, no obstante, su potente y embriagador aroma junto con la tonalidad de sus hojas nos indica que esta planta también tiene efectos energéticos muy importantes.
La albahaca nos dará buena suerte y atraerá la prosperidad a nuestras vidas, ya que repele las energías negativas.
Manzanilla
La manzanilla es una planta utilizada de forma muy común, pero sus propiedades energéticas y medicinales son asombrosas.
La manzanilla resulta idónea para romper con una mala etapa e iniciar un nuevo ciclo económico más próspero.
Si la queremos cultivar en nuestro hogar, la manzanilla nos ofrece muchas facilidades ya que no necesita apenas riego aunque sí debe estar en un ambiente soleado.
Caléndula
La caléndula es otra planta ampliamente utilizada por sus propiedades medicinales, no obstante, también nos ayuda a repeler las energías negativas y se considera como una planta de la buena suerte.
Colgar caléndula sobre nuestras ventanas o puertas permitirá que nuestro hogar se llene de sensaciones positivas y nos aportará múltiples beneficios, entre ellos, una mejora de la economía.
Jazmín
El jazmín es una planta que embriaga por su aroma y su delicada flor, de ahí que se utilice también para atraer el amor debido a su gran magnetismo, este magnetismo es también el responsable de atraer buena economía y prosperidad, resulta útil quemar su incienso en los negocios.
Si poseemos jardín, una buena opción para atraer abundancia a nuestro hogar es cultivarlos nosotros mismos, necesitan de un ambiente exterior soleado, y una tierra fértil y bien drenada.
La fertilidad que necesita el jazmín puede representar simbólicamente la abundancia y prosperidad que nos brindará.
Canela
La canela es una especia ampliamente utilizada en la cocina pero lo cierto es que es idónea para atraer el dinero, se recomienda para conseguir aumentos de sueldo, nuevos trabajos y suerte en todos los aspectos económicos.
La canela procede del canelo, un árbol perenne que puede llegar a alcanzar los 15 metros de altura, pero podemos emplear la especia (de la forma más natural posible) para beneficiarnos igualmente de las propiedades energéticas de esta planta.
Dracaena Sanderiana
Se conoce también como drácena aunque la planta que se emplea para atraer el dinero es la que recibe esta denominación botánica.
Popularmente se conoce como el “bambú de la buena suerte” y algunas tradiciones orientales consideran que es una planta con muchas influencias astrales.
Atrae la energía positiva y la buena suerte.
Prueba estas plantas para atraer el dinero, ya que además de cumplir esta función, rodearnos de plantas nos reporte múltiples beneficios, especialmente si las cultivamos y cuidamos nosotros mismos.
Recuerda que para optimizar el efecto de estas plantas debes cuidarlas adecuadamente, un ambiente con excesiva vegetación y además en mal estado, podría producir un efecto contraproducente.
