Evitar los robos con un hechizo muñeco de protección
Para evitar los robos y la presencia de ladrones en tu casa o en tu negocio, puedes realizar este hechizo de protección mediante un muñeco amuleto que servirá para mantenerlos alejados, que no consideren tu lugar como un objetivo interesante o que si se presentan merodeando, desistan de inmediato de robar pues se sentirán extrañamente amenazados y en peligro.
MATERIAL:
-Un poco de tela
-Sal gruesa
-Pimienta negra
-Pimientos rojos picantes o ajíes chiles rojos
-Ortiga o cardo
-Espinas
-Un clavo
– 5 Agujas o alfileres
-Cadena fina o soga
-Incienso o sahumerio de incienso
PROCEDIMIENTO:
Lo primero es trazar en la tela dos figuras humanas idénticas, que luego recortarás y coserás por todo su perímetro, dejando una abertura para meter los ingredientes.
Yo recomiendo usar una tela de color negro, o al menos de color oscuro, pues el muñeco para evitar los robos debe verse como el futuro del ladrón si es atrapado, es decir oscuro, triste, lóbrego. Utiliza cualquier tela si no tienes otra cosa, el ritual no especifica que sea como yo lo prefiero, pero hay una relación entre los colores y las cosas, de modo que no está de más si lo tienes en cuenta. ¿Puedo hacerlo con tela rosa? Sí, claro que puedes, funcionará igual, no te preocupes.
Una vez que has cosido la mayor parte del muñeco, puedes dibujarle o pintarle un rostro, con ojos , naríz y boca, o hacerlo con botones u otros retazos de tela.
En la abertura que has dejado, comienza a rellenar el muñeco con los ingredientes:
Coloca el ají chile picante, entero o cortado en trozos, como te sea más cómodo. Coloca las ortigas o cardos (utiliza guantes preferentemente!), pon unas cuantas espinas de cualquier planta, pueden ser de rosas, zarzamoras, espinas de cactus, etc.
Agrega la sal y la pimienta negra. Puedes incluso mezclar todo junto en un recipiente y rellenar con esa preparación.
El muñeco al rellenarse debe cobrar cuerpo, engordarse.
Cose la abertura para cerrar definitivamente el muñeco amuleto.
Ahora vas a traerlo a la vida y darle una finalidad:
Enciende el incienso sobre carboncillos o tu sahumerio de incienso, y pasa el muñeco repetidamente sobre el humo.
Luego lo tomas entre tus dos manos y le hablas lo siguiente:
“Te traigo a la vida para que me obedezcas y me sirvas por el tiempo que yo quiera. Tú representas a cualquier persona ladrona o con intenciones de robo que desee o intente entrar en mi casa o negocio, y todo lo que te amenace a ti, amenazará a la persona. Todo lo que tú sufras ella lo sufrirá. Tú estás aquí como advertencia, tu sufrimiento es la barrera que detiene al ladro. Que así sea. Estás bajo mi mando y mi poder. Que así sea. Nada puedes hacer contra mí o contra este lugar ni contra los que aquí viven o están. Que así sea. Pagarás con graves consecuencias si desobedeces. No lo hagas. Que así sea y así será porque está mandado.”
Ahora vas a colocar un clavo en la pared o en el techo. Puedes colocar este hechizo para evitar los robos en cualquier parte de tu casa o negocio, recuerda que debe estar allí colgado todo el tiempo, por lo que tal vez quieras buscar un lugar discreto que no sea visible, para no llamar la atención de las personas.
Ata una cadena o una soga o cuerda (un cordón de zapato o zapatilla servirá) en la pierna derecha del muñeco y cuélgalo cabeza para abajo con la soga del clavo que antes has colocado.
Clava un alfiler o agua en cada mano, uno en cada pie y uno en la cabeza.
Es conveniente que la cara del muñeco no quede mirando hacia la pared, sino hacia fuera, para que de manera simbólica si entrase un ladrón, aunque no viera el muñeco, él pudiera presentirlo y “ver” el destino que le espera.
Deja el muñeco allí colgado todo el tiempo que desees y esté te servirá de protección para evitar los robos y los ladrones. Cada vez que escuches o leas, que veas en las noticias que han atrapado a uno, en cualquier parte, coloca otro alfiler en el muñeco, para que de esta manera reciba su justo y merecido castigo. Esto es un paso opcional, pero si lo haces de alguna manera contribuyes a que se haga justicia en general y que otras personas también puedan estar o sentirse protegidas, o al menos que reciben justicia.
Si en algún momento quieres deshacerte del muñeco, simplemente debes descolgarlo y quemarlo en una fogata o arrojarlo a un curso de agua. No te lo quedes tú de ninguna manera si lo has descolgado. Si lo descuelgas, que sea para tirarlo. Puedes tenerlo cien años si lo deseas, pero siempre suspendido cabeza abajo colgando. Ten en cuenta eso.
¡Y eso es todo para evitar los robos! Tu muñeco de protección los mantendrá bien alejados, ¡manos a la obra y mucha suerte!!