Proteger un vehículo y a quienes lo utilizan con un hechizo de bendición.
Para proteger un vehículo, ya sea un coche, una bicicleta, una motocicleta o cualquier tipo de transporte que uses, este ritual te será muy útil y por supuesto muy efectivo.
Lo primero que deseamos lógicamente es protección para todos los que usan el vehículo o se transportan en él, que no les pase nada jamás. Luego, deseamos que no le pasa nada a los terceros, no queremos atropellar a nadie ni causar ningún daño a los demás y también deseamos que nuestro vehículo nunca se rompa, que no haya desperfectos mecánicos, gastos, demoras, complicaciones, por ello con nuestro ritual, vamos a bendecir el auto y dejarlo absolutamente protegido contra todo mal.
Puedes hacerlo en cualquier día pero en martes o sábado es mejor, La luna debe estar en cuarto creciente, preferentemente.
Material:
-6 velas en total:
1 verde (elemento tierra)
1 amarilla (elemento aire)
1roja (elemento fuego)
1 azul (elemento agua),
1 blanca (para protección y bendición)
1 negra (para absorber y eliminar todo lo malo y negativo)
– Tu vehículo
-Un papel y algo para escribir
-Una o más de estas hierbas: Romero, salvia, eneldo, hinojo
-Un recipiente grande, olla o cubo con agua y al menos 1 kilo de sal de grueso
-Una bolsa o trozo de tela de color blanco.
Es conveniente que hagas esto en un lugar cerrado, lejos de la vista de curiosos, pero puedes hacerlo en plena calle si no te importa el qué dirán. Yo recomiendo que lo hagas en tu garaje.
-Coloca cada vela sobre un plato, deja la vela negra aparte.
-Las otras 5 velas las vas a acomodar alrededor del vehículo, en el suelo, haciendo una estrella de 5 puntas, en este preciso orden:
-Enciende todas las velas, incluida la negra que tienes aparte.
Escribe en el papel el hechizo que deberás decir:
“Hago esto para proteger a todos los que vamos a usar y ocupar este vehículo, creando un lugar sagrado, a salvo de todo.”
Continúa escribiendo:
“Por el poder del agua, protejo a los demás de este vehículo”
“Por el poder del aire, protejo este vehículo de fallas y roturas”
“Por el poder del fuego protejo a todos y a este vehículos de accidentes y de robos”
“Por el poder del aire, protejo a este vehículo y a sus ocupantes en todos los viajes y movimientos”
“Que así sea. Gracias porque ya está hecho.”
-Una vez que has escrito el hechizo en el papel, tomas el cubo o recipiente con agua, le viertes la sal y la hierba que has escogido.
Muévete alrededor del vehículo mientras vas salpicando con tus manos unas gotas de agua, lo haces sobre sus puertas y techo, en el capó, mojas los neumáticos, abres el baúl y salpicas allí, luego el motor y finalmente salpicas un poco en el interior del vehículo. Esto claro si tienes un coche. Si tu vehículo es una motocicleta, una bicicleta u otro, moja tanto como puedas.
-Dejas el cubo y tomas la vela negra con su plato.
Te colocas frente al vehículo, parado ante la vela blanca (en el lugar donde está la carita sonriente amarilla) Ten en una mano la vela negra, encendida, y en la otra el papel que has escrito.
Lee en voz alta todo el hechizo completo para proteger un vehículo.
Una vez que has leído y hecho el conjuro, quema el papel con la llama de la vela negra, dejando que las cenizas queden en el plato.
-Ahora dejas la vela negra allí donde estabas parado, que se queme y consuma completa, luego tirarás todos esos restos a la basura.
El resto de las velas déjalas arder un poco más, pero deberás apagarlas sofocándolas con algo (una cuchara por ejemplo) antes de que se consuman del todo. Debe quedarte un cabito de vela, pequeño, que luego guardarás en tu bolsa o tela blanca.
Cada vez que apagues una vela dices:
-En la vela roja: “poderes del fuego, gracias por esta bendición”
-En la vela amarilla: “poderes del aire, gracias por esta bendición”
-En la vela verde: “poderes de la tierra, gracias por esta bendición”
-En la vela azul: “poderes del agua, gracias por esta bendición”
-En la vela blanca: “poderes del Espíritu, gracias por esta bendición”
Tomas todos los restos de vela y los colocas en la bolsa de tela, si te ha quedado agua con sal y la hierba, salpicas un poco la bolsa y la guardas en tu casa en un lugar seguro. Si tienes una fotografía de tu vehículo, la añades a la bolsa, esto es opcional.
Los restos de vela negra y las cenizas, como dije, los arrojas a la basura.
¡Y eso es todo! Con este potente ritual de cuidado y bendición, habrás logrado proteger un vehículo contra cualquier infortunio, incluso hasta de las miradas envidiosas. ¡Manos a la obra y mucha suerte!!