Material:
Platos sucios.
Guantes de goma.
Agua caliente con detergente.
Procedimiento:
Lo primero que debes hacer, es poner en la fregadera abundante agua caliente con el detergente habitual para lavar los platos. Es necesario que el agua mantenga la temperatura y no se entibie ni se ensucie demasiado.
Después, cambia el agua cuando lo consideres necesario. Los guantes de goma tienen la función de proteger tus manos del calor del agua.
Imagina que los platos, tazas, vasos…., que estás lavando, son tus propios problemas, tus propias preocupaciones, que se desean resolver.
Mientras los lavas, visualiza la disolución de toda la negatividad, con fuerza y convicción.
Todo quedará limpio y resplandeciente.
Debes tener fe en tu inconsciente, él se encargará de actuar sobre tus problemas con la misma fuerza que emana de tu interior.
Enciende una vela blanca al santo de su devoción como símbolo de agradecimiento.
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