Tu entorno familiar primario era activo, deseante y algo avasallante; tu madre se adelantaba a tus deseos decidiendo todo por ti, es por eso que tiendes a apurarte en los procesos y a querer definir rápido para sentir que no se te adelantarán y puedas decidir por vos mismo. Tienes una personalidad deseante y movediza, construiste un estilo accionador a manera de protección para que el resto no te imponga sus deseos. Necesitas encarar y tomar la iniciativa ante los conflictos.
La paciencia no es tu fuerte. Te expresas sin vueltas, de manera sencilla y espontánea, aunque para los otros puedes resultar algo hiriente. Asumes riesgos innecesarios para asegurarte que vas más rápido que el resto, defendiéndote de una sensación de avasallamiento de tu entorno. Aparentas ser intrépido y arriesgado y te híperactivas para no angustiarte. En el fondo, tienes deseos muy infantiles o inconfesables y ridículos enojos. Puede que te juzguen de excesivamente franco, incisivo o frontal, pero en momentos de tensión sueles ser el que toma la iniciativa, el que se anima a lo nuevo funcionando como motivador e impulsador de otros.